Toma la decisión de no ser lastimado, porque has sido llamado a libertad.
No dejes que las obras de la carne den vueltas en tu mente y alma, renuncia a eso, ve a la cruz las veces necesarias.
Toma la decisión de ser hijo perdonado libre y amado, Si por alguna razón estás batallando con obras de la carne, ve a la cruz de Cristo y aférrate a ella.