Esta columna es para ayudar a la senadora Isabel Zuleta, pero para poder escribirla tuve que atravesar ola por ola el mar de noticias que suceden en Circombia: hinchas de Millonarios ingresaron un ataúd con un cadáver a las graderías de El Campín (aunque a diferencia de los del Deportivo Pereira —que perdieron 4 a 0 contra un equipo brasilero— no lo pusieron a tapar); se cayó un puente en pleno puente; el presidente sugirió que las amenazas al fiscal Barbosa son las segundas mejores autoamenazas del mundo.