Comodorenses por el mundo

Moira y Agata Yafar se dedican al bellydance en India y nos cuentan su experiencia de vivir desde el otro lado del mundo. Los pro y los contra de estar en la India y las anécdotas más insólitas del país.

De Comodoro a trabajar en Charlotte: las experiencias de Francisca Lazaro, una Au Pair en Carolina del Norte

En una nueva edición de Comodorenses por el Mundo hablamos con Candela Scalzi, una odontóloga que decidió emigrar y ejercer su profesión en Barcelona, lugar que destaca, pero que también explica cuáles son las contras y lo no tan lindo de estar tan lejos

Con más de cuatro años en España Luciana nos cuenta cómo es vivir en Málaga. Las costumbres, la comida y el estilo de vida europeo.

Pilar Sonzini vive hace cinco años en Francia, llegó por una beca y decidió radicarse en este país. Nos contó qué tanto nos "odian" los franceses después del Mundial y derribó algunos mitos sobre este hermoso país que a veces no parece tan hermoso.

Indira Hiayes es nacida en Comodoro Rivadavia y hoy vive en Dubai haciendo lo que más le apasiona: bailar tango. Un talento local que disfruta de su arte por todo el Mundo

Flavia se fue de Comodoro cuando terminó el secundario. Lleva 7 años viviendo en Croacia. No sabía que estaba emigrando. Se fue por una beca y se quedó.

En pandemia se convirtió en la cocinera de la colectividad latina y comenzó a vender empanadas con gran éxito (hasta la invitaron a Masterchef) fusionando la cocina argentina y la croata.

Armó su mochila, se subió a un avión, apareció en una isla paradisíaca de Croacia y lo salvó su pasión por la parrilla. Cocinó para la reconocida cocinera Eleonora Espinoza, no olvida que salió de Zona Norte y admite que en Eslovenia lo entienden mucho más de lo que esperaba.

La historia de Silvina tiene ribetes cómicos (ahora, reconoce ella, porque en su momento no les parecieron tan graciosos) y lo que empezó como unas vacaciones terminó con toda la familia instalada en Gandía y al frente de un emprendimiento gastronómico. El relato se entrecruza con el de Abril, su hija mayor, que algunos años atrás había decidido emigrar y trabajar en distintos países. Una situación “mascoteril” y una sucesión de “señales” fueron determinantes para su decisión de quedarse en España.

El recorrido de Manuel cruza varios países, culturas y -por supuesto- estilos gastronómicos. Después de recorrer Latinoamérica y trabajar en varios países, decidió probar en España, la tierra de sus abuelos. Su camino personal lo llevó a alejar a los animales de su dieta y ahora su propósito es demostrar que un menú vegano está lleno de sabores, texturas y nutrientes. Su amor por los asados (por lo que significa para los argentinos ese momento compartido con amigos y familia, no por poner carne a la parrilla) lo llevó a meterse de lleno en un proyecto que lo ilusiona: crear chorizos veganos. Por supuesto, también está desarrollando un pan que sea el perfecto compañero, para que nadie se quede sin disfrutar de un riquísimo choripán.