Germán Martínez, alguna vez dirigente del derechista Acción Nacional, y hoy senador de Morena, critica a FRENA, el frente que se ha instalado en el Zócalo de Ciudad de México y en la opinión pública demandando la renuncia de Andrés Manuel López Obrador pero sin ninguna propuesta que no sea el oponerse al presidente. FRENA es de ultraderecha, son ultranacionalistas y abanderados de la plutocracia, dice el legislador. Pero representan también un recordatorio, dice Martínez: son una advertencia de que si Monera falla en su propósito de renovar la vida de México, se le estará abriendo una puerta a los Bolsonaro, a los Berlusconi, a emisarios del empresariado que buscarán instalar un modelo ultraconservador.