Vas a pasar el resto de tu vida en el futuro, tu pasado ya quedó atrás. Pero como no conocés el futuro y no tenés control sobre él, mirar hacia adelante puede dar miedo.

No es que no entendemos que necesitamos cambiar. A veces nos falta la motivación. ¿Por qué nos falta motivación? ¿A dónde podemos ir en busca de ella?

Algunas personas se centran en el pasado. Por lo tanto, el cambio va a ser imposible. No es el pasado que es necesario tratar; en realidad el pasado ya no existe. No es el pasado que hay que cambiar; es a uno mismo.

La mayoría de personas que viven agobiadas por las preocupaciones son las que ignoran las promesas de Dios o las conocen, pero no se aferran a ellas.

El desánimo es una de las principales razones por las que muchos se sienten tentados a renunciar a la fe, la esperanza y expectativas en Dios.

Ha sido un tiempo de penurias y dolor para la mayoría. ¿Cómo arrancar de nuevo después de un tiempo de pérdidas y derrotas?

Cuando lo encaramos así, la fe siempre será recompensada, incluso cuando los porqués queden no tengan respuesta.

¿Qué opción nos ofrece la fe cristiana? Seguir confiando en Dios al mismo tiempo que reconocemos que no tenemos respuestas para todo lo que sucede.

Cuando uno tiene que tratar con un Dios invisible, es inevitable que aparezcan las dudas. No quiero desalentar la fe de nadie, pero a esta altura tampoco quiero provocar unas expectativas poco realistas sobre lo que la fe en Dios puede lograr

Estaba espantado de que, después de la catástrofe de las tribus del norte pensaran que Dios no era capaz de hacer lo mismo con ellos.