"LOS puntos ESCENCIALES en el uso exitoso de la ley de asunción son estos:
Primero que todo: anhelar; añorar; intenso, flameante deseo.
Con todo tu corazón debes querer ser distinto a lo que ya eres. Intenso, flameante deseo (combinado con la intención de hacer lo bueno) es el impulso primero de la acción, el comienzo de toda aventura exitosa. En cada gran pasión que obtiene su objetivo, el deseo es concentrado e intencionado. Tú debes primero desear y luego tener la intención de lograrlo.
'Como el ciervo anhela las corrientes de agua, así suspira por ti, oh Dios, el alma mía.'
(Salmos 42:1) ..."