Muchas veces escuchamos que para valorar nuestro trabajo debemos cobrar por él, porque “la transformación comienza con la transacción”.
Sin embargo, esta creencia puede limitarte, especialmente al emprender. Al principio, validar un servicio o producto puede ser difícil, y regalarlo estratégicamente puede abrir puertas a testimonios valiosos y construir confianza en lo que ofreces.
La clave está en recordar que tu valor no depende del precio que pongas a tu producto, ni de la cantidad de ventas que tengas.
La abundancia comienza dando, desde un lugar de servicio y propósito.
Al hacerlo, activas un ciclo positivo donde la retroalimentación y las oportunidades fluyen de formas inesperadas.
Confía en tu intuición y, si sientes que necesitas regalar algo para validar tu oferta o ganar confianza, hazlo sin miedo.
Tu valor está en ti, no en lo que cobras. Mantente conectada con tu propósito y deja que la abundancia te encuentre.
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