¿Qué tendemos a hacer cuando nuestra realidad no concuerda con nuestros sueños o nuestras expectativas? Solemos culpar a Dios, a nosotros mismos, o solemos intentar tomar más control. Pero la historia de José nos ofrece otra respuesta, la de la esperanza y la fe activa. En medio de las situaciones difíciles, José nos recuerda que a pesar de las circunstancias en las que nos encontremos, Dios está obrando. A veces no hay un POR QUÉ para algo que te está pasado. Pero con Dios siempre hay un PARA QUÉ.