Si queremos ser nuestra mejor versión es muy delicado hablar mal de nosotros mismos cuando pensamos en lo que hacemos, vemos, sentimos y deseamos; bien sea pensando en voz alta o en diálogo con terceros porque le estamos a firmando a nuestro interlocutor y cerebro la poca valía y respeto que tenemos por lo que sentimos sobre nosotros mismos.
También de formas “inocentes” repetimos una serie de mensajes negativos que se calan en el subconsciente y se convierten en realidad ya que nuestro cerebro es una gran computadora que manifiesta en el plano físico los mensajes más reiterativos o los que se hilvanan con más continuidad.
Visítanos en: https://vencedores.eu
Conecta por https://instagram.com/isaiaseblanco
Conecta por https://instagram.com/vencedores.eu