El método divino tiene una característica principal: la perfección!
Cosas inimaginables, otras sencillas, lugares mas allá del cielo o pequeños rincones olvidados, manifestaciones naturales extraordinarias o cotidianas e imperceptibles.
Vemos diversidad en los recursos que Dios usa, pero notemos que existe una particularidad: Las personas. Las personas que Dios usa no tienen en si mismas una perfección a destacar, pero si que creen en alguien excepcional, dónde eligen la mirada inexplicable de las promesas, y su certeza está apoyada en un poder glorioso mas allá de la percepción real de la razón.
Podemos concluir que no son las personas en definitiva. Pero lo sorprendente es que Dios las incluye en una ecuación que tiene un propósito que trasciende lo temporal, con vista hacia a lo eterno!