El camino para determinar la causa raíz no es una línea recta. Comenzamos con la experiencia general y a través de la deducción tratamos de sacar conclusiones específicas, teorías o hipótesis. Esas hipótesis son puestas a prueba en busca de la "verdad", y los resultados a su vez alteran nuestra comprensión general (inducción).*
Para entender un problema es conveniente entenderlo como una brecha: la distancia que nos separa desde el punto A al punto B; el punto A es donde estamos hoy y el B es donde queremos llegar.
Pero, ¿cómo solucionar un problema si no tomamos tiempo para entender dónde estamos hoy?
Las metodologías, como el reduccionismo, ayuda a desafiar sus paradigmas y entonces favorecen el pensamiento crítico.
Conozca más en este micro-aprendizaje.