Ser feliz es dejar de ser víctima de los problemas y volvernos arquitectos de nuestra propia historia... es aprender que no siempre las noches serán serenas porque las tormentas existen… es aceptar que incluso las personas que más amamos, nos pueden herir… es aceptar que lleva tiempo construir confianza y tan sólo segundos destruirla… ser feliz es aceptar que la vida es corta y que el tiempo perdido jamás regresa…

El amor, en su forma más pura, tiene el poder de ayudarnos a redescubrirnos a nosotros mismos, incluso cuando olvidamos quienes somos...

Un buen día lo hace las ganas que le echas, lo hace cada vez que agradeces y las veces que te maravillas con lo simple de la vida... sí, un buen día lo haces tú...

A veces, nos preocupamos demasiado por cosas que no merecen tanto de nuestra atención, la clave está en redirigir el foco, no quedarnos mirando al abismo… la vida es más simple y maravillosa de lo que parece… si algo te entristece, déjalo ir…

Cuando alguien se equivoque, abre más los brazos que la boca, a este mundo le sobran opiniones y le faltan abrazos…

Abrazar la última página del libro que te gusta, esperar en silencio que termine tu canción favorita, un té o café con la mejor compañía… ahí es cuando el tiempo se detiene…

...Al final, no son los grandes logros los que definen nuestra historia, sino los pequeños gestos, esos que tal vez nadie ve, pero los que llenan el alma...

Al final del día siempre hay algo que olvidaste hacer o decir… no tienes un mañana comprado ni asegurado... vive el hoy para mejorar y vivir en excelencia…

Me gusta la gente que me hace reír, sinceramente, creo que reír es la cosa que más me gusta, cura una multitud de males y es probablemente la cosa más importante en una persona…

Solo al mirar y aceptar cada parte de ti, puedes caminar en plenitud, en paz y en armonía con tu propia luz...