En un mundo lleno de distracciones, te invitamos a descubrir el verdadero valor de la presencia: estar cara a cara con Dios y con quienes nos rodean.En este episodio, reflexionamos sobre:
- Nuestro cuerpo como templo del Espíritu Santo
- Jesús como ejemplo de presencia viva
- La importancia de reunirnos en comunidad
- El cuidado propio como acto de amor al prójimo
Vivir el diseño de Dios empieza con estar presentes. Únete y déjate inspirar a vivir cada momento con intención y fe.