Dentro de las Jornadas Académicas de Intercambio Iberoamericano, la profesora Celeste Acevedo propone el uso de herramientas artísticas para que el profesorado de cualquier materia genere emociones en la corteza cerebral de sus alumnos con el fin de que la información intelectual dada quede indeleble a nivel neuronal. El proceso que la profesora menciona es parte de la neuro - educación, que señala que las emociones juegan un papel fundamental, y el arte genera dichas emociones.
Existen evidencias de la relación específica entre una intensa práctica musical y la capacidad de almacenar grandes cantidades de información en la memoria.
La música suscita la plasticidad cerebral a través de la emoción y la motivación, lo que permite que el cerebro esté en constante ejercicio. Su práctica genera dopamina de manera natural, situación que el cerebro identifica como placer a plenitud, liberándolo de tensiones y predisponiéndolo para almacenar información en grandes cantidades.
La ponencia de Celeste Acevedo, profesora superior de piano, directora de la Escuela de Música Suzuki y promotora de la primera orquesta infantil con niños de 3 años de edad en adelante, se desarrolló el 23 de septiembre de 2015 en el Teatro de las Artes del Centro Nacional de las Artes. México, D.F.