"Más que pueblo versus elite o gobierno versus oposición, el principal motivador del descontento popular es el conflicto entre los delincuentes y la gente de bien. La candidatura que mejor represente el miedo de la gente por la inseguridad y la demanda por un gobierno que tenga mano dura para combatir a los delincuentes tendrá una poderosa arma para convencer a esa enorme cantidad de personas que recién comenzará a poner atención a la campaña presidencial después de las celebraciones de fiestas patrias del 18 de septiembre".