El exsenador pampeano cuestionó la desorganización del radicalismo a nivel nacional y provincial, habló de “vergüenza ajena” por el presente partidario y advirtió que si no hay una autocrítica profunda “vamos camino al papelón”.
En una extensa entrevista radial, Juan Carlos Marino lanzó una fuerte autocrítica hacia la Unión Cívica Radical, tanto a nivel nacional como en La Pampa. El exsenador aseguró que el partido “no tiene conducción”, que ha sido víctima de sus propias desprolijidades internas, y que su estado actual es “producto de lo que sembramos”.
“Hoy la conducción nacional no existe, y en La Pampa tampoco. Estamos haciendo todo lo posible para destruir un partido centenario. Yo siento vergüenza ajena como radical”, dijo.
Marino repasó la historia reciente del radicalismo, desde la elección interna que llevó a Martín Lousteau a la presidencia del partido hasta los vaivenes de la dirigencia ante el balotaje presidencial entre Sergio Massa y Javier Milei. “Un día el presidente del partido dice que hay que abstenerse, a la semana sale a militar por Milei, y a la siguiente la vice llama a votar por Massa”, ejemplificó.
Sobre la situación pampeana, apuntó directamente a la falta de liderazgo y coordinación. “No puede ser que a dos días del cierre de listas no sepamos quién es nuestro candidato. Ya perdimos bancas por caprichos, y parece que vamos por el mismo camino”, advirtió.
Además, cuestionó la falta de apertura dentro del partido. “Antes una convención provincial reunía a 140 personas. La última tuvo 40. No convocan a nadie. Si seguís así, vas a tener una sala funeraria en vez de un comité”, ironizó.
También criticó a dirigentes que, a su entender, priorizan sus proyectos personales. “Escuché que Martín Berhongaray quiere preservarse para la gobernación. ¿Y quién le garantiza que en dos años va a tener chances? En política fiar es complicado”, señaló.
Pese al diagnóstico sombrío, Marino dejó claro su interés por volver a competir: “Me encantaría ser gobernador de La Pampa. Estoy preparado. Si no soy yo, ojalá sea otro radical, pero hay que dejar de hacer papelones”.
Por último, advirtió que si la UCR no logra articular un frente electoral competitivo, “el peronismo o la Libertad Avanza volverán a ganar”. Y concluyó: “Estamos frente a una oportunidad histórica, pero la estamos desperdiciando por desidia e inoperancia”.
