En medio de porros, gaitas y cumbias, charlamos esta vez, de uno de esos utensilios que es obligatorio tener en la casa, porque en él podemos echar, cargar, llevar, guardar, contener, proteger y llenar. ¿Alguien pensó cargar agua?, claro, ¿Alguien pensó en recoger aguamasa para los marranitos? por su puesto, ¿Alguien recordó alguna resaca?, ay dios. Y es que hablamos del balde, receptáculo por excelencia.