Cuando algo ocurre en una circunstancia o con otra persona y te sacude las emociones, incluso puede enojarte o afectarte fuertemente, todo sugiere que debes reflexionar sobre ello, por qué esa característica o comportamiento particular te afecta. La idea es, que lo que percibes en los demás puede ser un reflejo de aspectos no resueltos o áreas de mejora dentro de ti mismo. Al abordar estas reacciones desde una perspectiva introspectiva, objetiva y cabal puedes trabajar en desarrollar la comprensión, empatía y aceptación, lo que contribuirá a tu crecimiento personal y espiritual.