Comer no es igual a nutrirse. Acostumbramos a comer pero no a ser selectos con lo que comemos; de ahí la importancia de alimentarnos sanamente con frutas y verduras, cereales integrales y carnes blancas, entre otros alimentos, que nos provean la cantidad de proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales que necesita nuestro cuerpo.
Se recomienda evitar el consumo de azúcar, lácteos, embutidos, carnes rojas, gaseosas, jugos (naturales y empacados) y productos que contengan gluten, entre otros.
Es fundamental complementar la alimentación con suplementos, tales como, omega 3, multivitamínicos y probióticos, preferiblemente de la marca NUTRILITE; líder mundial en su género, con 90 años de experiencia y la única empresa con granjas orgánicas certificadas propias, en las cuales siembran, cultivan, cosechan y procesan los vegetales, fuentes de vitaminas y minerales.