El nacimiento del Campo Freudiano es un instrumento para entender el presente del psicoanálisis y de nuestras instituciones, para orientar nuestras decisiones -las de ahora-, para no cometer los mismos errores, o para cometerlos, pero advertidos, de las soluciones que ya se ensayaron y que duraron lo que duraron. En cierto sentido, el libro es un manual de uso para los responsables de las Escuelas y un oráculo para los oídos atentos. Anticipa el futuro para fallar cada vez mejor y demostrar cómo triunfa el psicoanálisis. Descubre los inventos, las piruetas, las idas y vueltas que son necesarias para tratar el real que anida en la formación del analista. Y también es un libro para asistir en acto -como decimos-al deseo decidido de Miller, a su voluntad encarnada, a su firmeza a la hora de tomar partido y su docilidad frente a lo imposible. Cuando Manuel Zlotnik y yo nos encontramos con el puñado de jóvenes que hoy van a tomar la palabra -solo Micaela Parici es miembro de la Escuela-, les pedimos que escojan párrafos que sirvan para pensar el momento actual e inviten a Miller a hablar del presente, del futuro. Ustedes dirán si lo logran. La ocasión es única. Es hoy y es ahora. La palabra es de Miller. (G. Brodsky)