Los demócrata que hoy en Estados Unidos se presentan como defensores de la comunidad negra fueron, por el contrario, el partido opuesto a la abolición de la esclavitud. Después de la guerra civil, los vencidos establecieron en el Sur un régimen racista, de supremacía blanca, en torno al Partido Demócrata, que sólo desapareció en los años 60 del siglo pasado.