Amar al enemigo no significa tampoco tolerar las injusticias y retirarse cómodamente de la lucha contra el mal.  Amar al prójimo significa aceptarlo, respetarlo, y mirarlo con misericordia.

El amor no se acaba nunca.  Florece por que es gracia y regalo de Dios.

Lo que Jesús nos quiere decir, en definitiva, es que las relaciones hombre-mujer sean vividas basadas en la libertad, en el respeto y en el amor. Jesús nos llama a vivir unas relaciones humanas en la verdad y en la sinceridad del corazón.

El hombre no puede vivir sin amor.  La vida no tiene sentido sin amor.  Sin amor lo que hacemos no tiene razón de ser.  Sólo el amor ofrece razones para vivir y sólo el amor ofrece razones para esperar.  El amor da sentido a la vida y es el sentido de la vida.

Cristo, tú eres nuestra verdadera sal y nuestra luz. Ayúdanos a ser como Tú: Sal de la tierra y Luz del mundo. ¿Qué significan para nosotros hoy las palabras de Jesús “ustedes son la sal de la tierra y la luz del mundo”?

Nadie sabemos dar una respuesta demasiado clara cuando se nos pregunta por la felicidad.

Todo el Evangelio es un mensaje de felicidad y alegría. Las Bienaventuranzas son los gritos de alegría de Jesús ante la sensación con la que Él vive la proximidad del Reino de Dios.

En este medio de comunicación con ustedes encontrarán la luz del evangelio, reflexiones espirituales , temas de importancia que nos ayudarán a entender como Dios nos habla en el día a día.