Es muy común escuchar hoy en día a personas que se quejan de no tener enfoque, de no poder concentrarse en una actividad durante mucho tiempo, que sufren de procrastinación. Sin embargo, resulta curioso observar que esas mismas personas son capaces de pasar horas enfocadas en ver redes sociales, maratonear series o jugar videojuegos.
La respuesta es bastante obvia. Tenemos dificultad para enfrentar esas tareas que consideramos aburridas, difíciles o tediosas: estudiar, limpiar la casa, hacer ejercicio físico, meditar...
Cambie esas actividades por algo más placentero, como ver una película, jugar un juego o ver videos en internet. En estos casos, no tendremos ninguna dificultad en pasar horas haciendo esas cosas.