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Cuando Canadá tiene fresco aún el recuerdo de la crisis provocada por el consumo de los opioides y las consecuencias de la misma siguen presentes en diversas partes del país, los nuevos desarrollos tecnológicos en materia de salud siguen haciendo su aporte.

Un implante, practicado por médicos especializados, puede convertirse en una nueva opción para los adictos a esas sustancias, en su intento para superar su dependencia.

Según nuevas disposiciones, los pacientes podrían ser admisibles a un tratamiento de entre 6 meses y un año de duración, que implicaría la colocación bajo la piel de un bastoncillo del tamaño de un fósforo, que suministra una dosis de medicamentos en el organismo del receptor.

Las condiciones de salubridad e higiene que rodean a los adictos suman más problemas. THE CANADIAN PRESS/Jonathan Hayward

El implante fue aprobado por la agencia de Salud Canadiense en abril de 2018 y es comercializado como el primero en su tipo, destinado al tratamiento de las adicciones a esas sustancias.

En diálogo con la agencia The Canadian Press, la doctora Seonaid Nolan, del Centro de Consumo de Sustancias de Columbia Británica, sostuvo que el implante se presenta como una opción a los tratamientos tradicionales con buprenorfina y metadona.

La especialista resalta, además, que la importancia del implante reside en el hecho de que hasta el momento sólo existían muy pocas opciones para revertir o controlar la adicción a los opioides.

La ventaja principal del implante es que elimina algunos obstáculos comunes en este tipo de situaciones, como es el hecho de que la persona que está luchando contra su dependencia de una sustancia tóxica se ve obligada a recordar que debe tomar un medicamento.

Los tratamientos tradicionales obligan al paciente a una responsabilidad que, a veces, no está en condición de cumplir. Foto. CBC/Elise Amendola/Associated Press

El implante, que está “programado” para liberar el remedio en el organismo del paciente de manera regular, elimina al mismo tiempo la necesidad de aplicar las medicinas bajo vigilancia.

Un paso adelante en la lucha contra este tipo de adicciones es el hecho de que la Agencia Canadiense de Medicamentos y Tecnologías de Salud (ACMTS), recomendó a los diversos sistemas de seguro médico que cubran los costos de los implantes para los pacientes cuya condición se halla estabilizada y necesiten hasta un máximo de 8 miligramos de buprenorfina.

La ACMTS es la encargada de homologar todos los medicamentos y tratamientos médicos autorizados por la Agencia de Salud canadiense.

Por su parte, el ministerio de Salud de Columbia Británica, anunció que un consejo independiente llevará a cabo un análisis del implante, antes de determinar si el costo del mismo será asumido por la provincia.

En 2017 y 2018 la ciudad de Vancouver fue escenario de la mayor crisis por abuso de opioides que haya afectado al país, superando incluso a la situación en Toronto.

El comercio de las sustancias en América del Norte alcanza a miles de millones de dólares. AP Photo/Patrick Sison

Columbia Británica registró una cifra cercana a los 3.000 muertos por consumo de opioides y el sistema sanitario provincial estuvo en alerta máxima por la situación, con equipos médicos, hospitales y paramédicos excedidos en su capacidad de acción, ante el gran número  de casos registrados en ese período.

Según la firma que obtuvo la licencia para comercializar el implante a nivel nacional, Thérapeutique Knight, con sede en Montreal, el costo del dispositivo sería de 1495 dólares canadienses, una cifra equiparable al desembolso necesario para 6 meses de tratamiento con buprenorfina.

La firma confirmó que hasta el momento sólo una persona en...