Rompió barreras. Lo hizo en 1985, año en el cual junto con un grupo de compañeras de la escuela, y comandadas por "Pichi Ruffo", le hicieron frente a Alumni y Barbarians de Uruguay para ser las precursoras del rugby femenino en Argentina. Lo volvió a hacer quince años más tarde, cuando la rama resurgió, sin apoyo de ninguna entidad Nacional o Provincial y bajo una estigmatización que todavía las asediaba. Lo sigue haciendo, no como jugadora, pero sí ocupando un cargo histórico y que comienza a darle el lugar que merecen en el deporte: Es la secretaria de la Subcomisión de Rugby Femenino de la URBA.
Vikinga por naturaleza y defensora de los derechos de las mujeres, a los 50 años tuvo el privilegio que pocos tienen en una carrera deportiva: Jugar en el club de sus amores (GEI), junto a su hija.
Los inicios del rugby femenino en Argentina; los insólitos viajes para jugar los fines de semana; los proyectos de la subcomisión; toda la transformación que se está generando en el deporte y mucho más. Pasen y escuchen a Mónica Mottura, una jugadora de alto impacto en el rugby femenino.