Tener baja autoestima te hace vulnerable y fácilmente manipulable. Aquellos que manipulan lo perciben y procuran que sigas atado a su manejo y voluntad. Tu ego busca permanente el reconocimiento y amor del otro, para que sigas existiendo, pero hay un momento en que tu espíritu dice: basta, así no soy feliz. Sin embargo, es posible librarse de la manipulación, sanar, e incluso contribuir a que quien nos manipula, pueda revertir su conducta