Uno de los desafío más comunes que ocurren en una relación, es el hecho de que una de las dos partes tenga que cambiar para que la relación se mantenga en equilibrio. Muchas veces estos cambios se producen de forma temporal, pero nuevamente la persona vuelve a los viejos patrones de comportamiento. Entiende por qué ocurre, cómo podemos hacer que estos cambios sean duraderos y qué hacer en caso de no conseguirlo.