San Francisco, California, es la segunda ciudad con las rentas más altas en el mundo: un departamento de dos recámaras cuesta unos 3600 dólares – unos 72 mil pesos al mes. Esto es así porque aquí se encuentran las sedes de las principales compañías tecnológicas del mundo, y con ellas llegaron miles de personas con sueldos altísimos que pueden permitirse rentas muy elevadas. La otra cara de la moneda es que quienes no pueden pagarlas son desalojados de sus casas y acaban en la calle.

Alguna vez hubo un México en donde el narcotráfico no imponía modas, costumbres y complicidades. Incluso hubo una Guadalajara --con sus modos, méritos y defectos— antes de que emblemáticas figuras del trasiego de droga se asentaran ahí. La reciente detención de Rafael Caro Quintero nos hizo recordar la vida en los años ochenta, década del esplendor y primera aprehensión del capo sinaloense: presentamos una cascada de memorias sobre Guadalajara, capital que recibió, con los brazos abiertos, a los señores del narco.

Miles de personas en México recurren a los seguros de gastos médicos mayores para la eventualidad de una emergencia de salud. Lo que no pocos descubren, para mal, es que cuando más necesitan el respaldo de un servicio que pagaron por años, terminan en situaciones en las que la aseguradora no responde como ellos hubieran esperado. ¿De quién es la responsabilidad cuando un seguro falla tus expectativas? Te presentamos cuatro casos donde los pacientes enfrentaron un sistema fallido en donde hospitales, médicos, compañías aseguradoras e incluso, en algunos casos, los pacientes tienen algo de responsabilidad.

Muchos lo critican sin conocerlo. Salvador Camarena quiso probar suerte y viajó por el AIFA. Esta es la crónica de un viaje al nuevo aeropuerto del sistema metropolitano, en donde —contra prejuicios— nuestro autor probó varias rutas para llegar al Felipe Ángeles y experimentó en carne propia las peculiaridades de esta terminal aérea construida y manejada por el Ejército Mexicano. ¿Su conclusión? Volvería a viajar por ahí.

Cada sábado por Paseo de la Reforma desfilan limusinas y hummers que llevan grupos de adolescentes en medio de la fiesta. Son las quinceañeras y sus cortejos que van a tomarse fotos frente al Ángel de la Independencia. La visita al monumento es una tradición nueva, pero las fiestas de XV años no han cambiado mucho, siguen siendo una versión de las celebraciones cortesanas y alrededor de eso hay una industria de vestidos hampones, flores, banquetes, clases de baile, chambelanes y limusinas. Fernanda Zúñiga fue a las expos de quinceañeras, a las tiendas especializadas, y claro, al Ángel.

Durante años la mamá de Pedro tuvo un trabajo que invariablemente terminaba en un duelo: era cuidadora de adultos mayores. Pedro se tardó mucho tiempo en darse cuenta que su madre lloraba a uno tras otro de sus pacientes, que vivía lutos casi secretos que no tenía con quién compartir como tampoco tenía una foto para poner en su altar de muertos.

Cuarenta años traficando con personas indocumentadas le han dejado las rodillas hechas polvo pero la boca llena de anécdotas, escucha aquí la filosofía de un pollero.

¿Qué hace a alguien caminar cuatro mil kilómetros y enfrentarse a todo, incluso a Donald Trump? Hace unos meses, miles de hondureños, guatemaltecos y salvadoreños de la Primera Caravana Migrante pararon en Ciudad de México en su éxodo al norte. Llegaron con los pies destrozados, pero no perdían la fuerza para llegar hasta la frontera. En ese momento no sabíamos que atrás vendrías muchos más. Escucha esta historia contada por Galia García Palafox.

En Apizaco, Tlaxcala, a medio camino entre Centroamérica y Estados Unidos, cientos de migrantes se han encontrado con un nuevo obstáculo: una reja que separa el único albergue de la ciudad de una de sus colonias.

Galia García Palafox se mudó de casa y la recibió una música coral, pensó que era una secta y fue tras ellos. Se encontró con el Coro Gay Ciudad de México y los siguió tres meses. Lo que encontró es que esta ciudad no es tan arcoíris como pensaba. Este es un episodio para celebrar … y para cantar las canciones que todos sabemos