Cindy. Christie. Naomi. Linda. Claudia.
No necesitan presentación. Ni apellido.
Durante finales de los años 80 y principios de los 90 protagonizaron las portadas de las más prestigiosas revistas, desfilaron para las más reputadas firmas de moda y, a golpe de belleza, carisma y actitud, fueron conquistando también otros terrenos.
Edurne Baz repasa el fenómeno que la industria de la moda vivió con la irrupción, en la década de 1990, de un grupo de poderosas, influyentes y mundialmente conocidas modelos, más relevantes incluso que las prendas que lucían.