Cada vez que nosotros escudriñamos las escrituras podemos ir descubriendo un poco mas sobre el corazón de Jesús, vemos algo muy importante sobre la actitud de Él, todo el tiempo fue confrontar aquello que no era correcto, y es algo que desde aquellos tiempos hasta el día de hoy esas palabras y todo lo que dejo escrito nos sigue confrontando y nos sigue bendiciendo y exhortando cada momento de nuestras vidas que ha sido necesario para poder crecer y formarnos conforme a lo que Dios quiere.

El discípulo es la persona que aprende la doctrina, ciencia o arte bajo la dirección cercana de un maestro y aparte la lleva a cabo, un seguidor es aquel que no necesariamente tiene que ser cercano, hay una diferencia significativa entre ser un seguidor de Cristo y entre ser un discípulo, la diferencia puntual entre estos dos grupos es la cercanía, mientras que el discípulo debe mantenerse cerca del maestro para seguir aprendiendo y el seguidor no.

Si tú quieres que tu vida sea diferente, no puedes ser solamente un seguidor, no puedes conformarte solamente con ir a la iglesia los domingos, con oír lo que dice la palabra, ni siquiera puedes conformarte con solo leerla, tenemos que permanecer cerca de Jesús para que tu vida de frutos y refleje un verdadero discípulo de Jesús.

Muchas veces nuestras prioridades no están siendo las correctas, es por que no queremos sacrificar comodidades, no queremos pagar el costo que tiene el ser discípulo, y muchas veces queremos justificar todo con cosas que interrumpen otras cosas que para ti tal vez sean mas importantes que le quitan el peso a otras que realmente son mas importantes en tu vida y más allá de que sean de Dios es el tipo de impacto que esas cosas tiene en tu vida, es por eso que debemos sacrificar cosas porque sabemos que en ese momento seremos mas bendecidos.

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Todo lo que tiene que ver con la vida espiritual tiene que ver con la fe, lo que hacemos dentro de la iglesia tiene que ver con la fe, nuestra fe está basada en creencias y nos mueve a realizar acciones, la fe en si misma no tiene poder, quien tiene el poder es Dios, por eso la fe nos lleva acciones y nos lleva a Él y de Dios recibimos poder para poder recibir las cosas que nos ha prometido, si nuestra creencia es errónea nos va a mover la fe y eso nos va a mover una acción pero esa acción no da buenos resultados por ser equivocada.

Debemos creer conforme a lo que Dios nos enseña, lo que Dios nos instruye, esa creencia puede ser confirmada por medio de una experiencia, incluso creer por pruebas, pero debemos creerlo también por convicción, simplemente porque nuestro corazón está convencido, no todo lo que creemos puede estar basado en el conocimiento comprobado, hay muchas cosas que tenemos que creer, pero no hacer comprobado, simplemente la convicción me hace afirmar esa fe, esa creencia.

La manera que tenemos en la que está basada nuestra fe y nuestras creencias es lo que dice la biblia, nuestra mente, razonamiento, nuestra lógica, nuestra ciencia, conocimiento, no puede lo más mínimo entenderlo, pensarlo, imaginarlo y menos razonarlo no es posible, nuestra condición humana y nuestra capacidad espiritual solo lo puede creer mediante una convicción, y es creer que Dios hizo los cielos y la tierra.

No podemos contaminar esta creencia de que Dios hizo los cielos y la tierra con teorías, porque son ideas, científicamente no puede ser comprobado, solo son el reflejo de la necedad del hombre por entender lo inentendible, no podemos comprobar que Dios lo hizo, pero sabemos que Dios lo hizo por convicción y esa creencia no puede ser contaminada porque afectara tu fe al querer acercarte a Dios.

El Evangelio tiene que ver con Dios, todo lo que hacemos tiene que ver con Dios que es nuestro creador, algo que nos enseñó es esa comunión con el Padre, Él nos la recordó constantemente, nos habla de su amor, su misericordia, y nuestra vida tiene que ver con Dios de eso se trata el evangelio que podamos comunicarnos con Él y tener una relación, nos puso aquí en la tierra con un fin, con un propósito, aunque no entendamos aun muchas cosas que pasan en la creación.

Entender la grandeza de Dios, la presencia de Dios nos es muy difícil, el ser humano no lo alcanza a entender, no lo alcanza a asimilar, es inmenso y solo podemos creer lo que nos dice la palabra, pero ese Dios poderoso, nos podemos relacionar con Él, al ver las escritas vemos que Dios da la gran oportunidad de comunicarnos con Él, Dios si quiere comunicarse con nosotros y que hagamos lo mismo nosotros, nos es difícil a veces por nuestra condición de pecado, pero si podemos hacerlo nosotros.

La Biblia nos muestra una y otra vez el deseo de Dios de comunicarse, pero también nos enseña la manera de hacerlo, el cómo acercarnos a Dios a través de las formas que Dios mismo ha establecido, Dios quiere hablarnos de manera personal, directamente pero aún hay formas de modo que nosotros como seres humanos podamos hacerlo, Dios nos enseña que nadie le ha visto, pero a pesar de eso podemos relacionarnos con Él, nosotros no podemos comunicarnos con Dios a través de figuras.

Debemos seguir los principios de Dios y quiere que tengamos una imagen más grande que no la puedas imaginar, no hay nada creado que se asemeje a su grandeza, pero saber que Dios está ahí porque escucha nuestra voz y el también nos habla en todo momento y siempre a pesar de la situación también está para y con nosotros.

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La sabiduría es el conocimiento profundo en alguna materia o ciencia con habilidad de aplicarlo, no solamente es el conocimiento, sino que es la habilidad que se tiene para poder usarlo en nuestra vida, el ser sabio, el ser inteligente y conocedor de la palabra, no me hace obediente son dos cosas diferentes, de nada nos sirve la sabiduría y el conocimiento, aplicarlo y ser exitosos en la tierra sino obedecemos a Dios, sino hacemos lo que Dios nos pide.

Cuando Dios nos da un mandamiento no es por su ocurrencia, simplemente es porque nosotros lo requerimos nos va hacer bien, el mandamiento es luz, es entendimiento, nos conduce en el camino, nos da luz en la obscuridad, nos ayuda en la dificultad, eso es el mandamiento y la ley, no la sabiduría, la falta de obediencia a Dios, tanta riqueza y admiración que puedes tener por tu sabiduría, te puede llevar acumular desmedidamente la riqueza.

El libro de Proverbios habla de sabiduría y consejos para vivir una buena vida terrenal, pero eso es muy diferente a la obediencia, hay muchos consejos que nos pueden llevar a muy buenas cosas, el conocimiento y la sabiduría te pueden llevar a ser rico, a saber, manejar muchas cosas, pero ser bueno, buena familia, buenos hijos, buen negocio si no obedecemos a Dios, de nada te sirve porque todo eso es terrenal.

La vida terrenal es vanidad, teme a Dios y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre, el fin de la vida no solo es adquirir sabiduría, el fin de la vida es obedecer los mandamientos de la tierra, esa debe ser nuestra principal actividad, deseo y esfuerzo y usar todo el tiempo que tenemos y que sea para obedecer a Dios, todo es con ese fin, obedecer sus mandamientos y obedecer su voluntad.

Cada uno de nosotros debemos reconocer al día de hoy que tenemos debilidades, áreas débiles en nuestra vida y lo que hacemos con esas debilidades va a tener un impacto sobre el éxito que logremos o no, el plan de Dios es bueno, es perfecto, su deseo es que te vaya bien, que hay éxito en este año y todo esto va a tener impacto como hagas frente a tus debilidades, también debemos desarrollar nuestras fortalezas, hacernos mas fuertes en las áreas hábiles pero también debemos confrontar nuestras debilidades.

Muchas veces queremos esconder nuestras debilidades, pensamos que, si no, las exponemos o hablamos de ellas, Dios las va aprobar y Dios no nos rechaza por nuestras debilidades, sino que, cuando tratamos de negarlas y creernos autosuficientes y ahí está también el fracaso, el éxito está en la dependencia a Dios, toda circunstancia que te atrevas a experimentar de la mano de Dios estará llena de éxitos y podrás disfrutar de esos planes de bien que Dios tiene para tu vida.

Tenemos que aprender a ser bien transparentes con Dios sobre nuestras debilidades, entendamos que, si vamos a lograr grandeza en nuestra vida este año y de disfrutar las bendiciones que Dios tiene para nosotros, entonces debemos ser bien honestos acerca de quienes somos, para ser frente a nuestras debilidades admitidas y permitir a Dios obrar en ellas tenemos que empezar a permitir que se hable a esas áreas expuestas y permitir ser guiados y aconsejados.

Permite que Dios hable a tus debilidades y ten confianza en su dirección, tienes que llegar a ese punto donde tienes una dependencia a Dios y esto lo vas a ver muy claro en tu vida de oración, porque esto habla mucho de si dependes de Dios o no, si nunca oramos es como hacer una declaración de que no necesitas a Dios y decir que tú puedes solo, y se vuelve un simple clamor de emergencia, tenemos que dejar que hable a nuestras vidas el consejo de tus padres, pareja y demás también ellos deben hablar a sus vidas y a sus debilidades.

Si ya aceptaste a cristo en tu vida y en tu corazón ya eres una criatura nueva, tu pensamiento, tu corazón y todo tu ser fue renovado, el pasado ya no existe, es todo hecho nuevo, Dios nos enseña que todo es parte de nuestro proceso de vida, el punto es que nosotros tenemos que conocer el punto de esas situaciones por las que estemos pasando, son las consecuencias de nuestra vida, estamos pasando por una prueba, Dios nos está hablando algo, eso lo tenemos que aprender y entender.

Nosotros tenemos que aprender que nosotros cuando conocemos a Cristo tenemos un propósito y que tenemos que buscar ese propósito y que Dios hará muchas cosas, lo primero que Dios hace cuando llegamos a Él es que nos empieza a sanar, también nos limpia, cuando Dios nos limpia, nos limpia de absolutamente de todo como adicciones, odio, resentimiento, envidias, complejos, tristeza incluso hasta pecado, el problema aquí es que a veces nosotros mismos no queremos ser limpiados.

Tenemos que dejar que Dios limpie todo y muchas veces lo que pasa es que nosotros nos sentimos limpios, desahogados cuando Dios nos limpia, pero el proceso a veces es difícil, deja que el proceso pase y que fluya, el proceso de restauración en muchas ocasiones llegamos rotos al Señor, Dios nos tiene que volver a unir todas esas piezas rotas, va dando un valor diferente, y tendremos ahora un valor más grande al ser restaurados.

Este proceso a veces puede llegar a ser muy duro porque Dios tiene que tocar ciertas fibras que nosotros hemos querido olvidar, y se tienen que recordar por que al final son parte de ti, de lo eres y quieres mejorar, Dios es bueno con nosotros y por eso nos bendice, es algo que tenemos que entender, es por lo que Dios ha hecho en nosotros y también entender y saber que, si Dios está con nosotros, ¿quién contra nosotros?

En este nuevo año tenemos mucha expectativa, pero toda esta expectativa requiere de mucha fe, el justo vivirá por la fe y las cosas van a suceder de acuerdo a la medida de fe que tenemos, cada vez queremos ir incrementando nuestra fe y creer más en Dios y ese es el propósito, la fe está conformada a creer en lo que Dios puede hacer, esa es la fe, nuestra fe tiene que ver con lo que Dios puede hacer, pero a veces no sabemos o no creemos hasta donde o como que puede hacer Dios.

Creemos que Dios puede protegernos, que el nos provee, nos puede sanar, en cada petición que le hacemos a Dios, Él también nos hace la misma pregunta de creer si lo puede hacer y no solo es contestar que sí, pero la respuesta a tu petición mostrará si realmente tuviste fe, conforme a tu fe te será hecho, debemos creer en su poder y en su deseo de que Dios lo quiere hacer por nosotros, y para mayor fe tenemos también mayores retos y tu fe te lleva acciones.

La forma en la que actuemos demostrará si realmente lo creemos, la mejor manera de saber si creemos algo, si Dios puede hacer la petición que le pedimos es por medio de nuestras acciones, la única manera de mostrar nuestra fe es con nuestras obras, recordemos algo muy importante y es que, aunque tengas mucha fe, la fe sin obras es muerta y las obras sin fe también lo son.

Tu convicción se demuestra por tus acciones, no tienes que ocultar tus acciones, la fe es palpable solo en tus acciones, debemos empezar a creer totalmente en Dios, descansar en Él y poner toda nuestra confianza y toda nuestra vida a Dios, tener esa convicción de que todo lo puede y que nunca nos dejará solos, que no solo sea creerle de palabras si no también con nuestros hechos.

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De acuerdo a la Biblia si podemos cambiar, si hay una transformación, si puede haber un cambio, no importa lo que una persona vivió en su niñez, que educación tuvo o el ejemplo que tuvo, incluso el carácter con el que nació, todos podemos cambiar y nuestras vidas pueden llegar al cien por ciento de productividad a lo que Dios espera de nosotros, si se puede ser transformados, renovando nuestro entendimiento y comprobando cual es la buena voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta.

A lo largo de nuestro crecimiento, las experiencias, los ejemplos que tenemos de la familia, maestros, amigos, todo eso que obtuvimos durante la niñez y el crecimiento influye en nuestra conducta y hemos creado hábitos y esos hábitos son actos repetitivos con los que respondemos y realizamos actividades, somos gente de hábitos, muchos de estos son malos y otros buenos, y nos afectan a nosotros y a otros a nuestro alrededor y ese es un verdadero problema, pasa el tiempo y cada vez lo repites y piensas que ya es parte de tu ser.

Todo lo que hemos aprendido lo podemos des aprender y entrar a otra nueva enseñanza y esa es la transformación que debemos de tener, y en donde viene esa transformación es en nuestra mente, porque las aprendiste, el primer paso para dejar esos hábitos es el reconocimiento de que son malos, tenemos que pasar todas nuestras acciones a la voluntad de Dios y eso es en la biblia, en su palabra, leer la biblia nos ayuda a ver si nuestras acciones son buenas o malas y podremos cambiar.

Cuando una conducta no es buena para nosotros, tampoco lo va a ser para los demás y tampoco lo será para Dios, por eso es importante hacer la voluntad de Dios y cambiar nuestro pensamiento y tenerla siempre presente saber que es buena, agradable y perfecta, no solo tienes que aprendértela, también es importante aplicarla siempre en tu vida, para llevar una vida bien que le agrade a Dios, y todo esto va de la mano para poder hacer la voluntad de Dios y poder cumplir el propósito que Dios nos ha mandado hacer aquí en la tierra.