El Señor no llama a quienes se sienten capaces. Dios recuerda a Moisés que no se trata de sus habilidades o talentos, sino del Dios que va delante de él. En Éxodo 4, lo que Moisés tenía en su mano, la vara de pastor, definía su vida; no era más que un simple "pastor".
¿Qué define nuestra vida? ¿Qué tienes en tus manos a las que te aferras y que no son de Dios? La vara de pastor era un palo muerto en sus manos. Pero ese palo muerto, en las manos de Dios, se convirtió en un instrumento de poder, haciendo maravillas a través de ese bastón.
¿Qué tienes hoy en tus manos? ¿Qué quiere Dios que le entregues?