Yo acostumbro a medirme por las cosas que he logrado, pero mas aun por las que no. Y de ahi parto para darme valor y créeme capaz o no de hacer cosas. Sin embargo, luego de unas conversaciones con una amiga, ambas caimos en que la meta es el propio camino, el día a día. Cuando nos enfocamos en lo que "no" hemos logrado, muchas veces partiendo de que no se ha logrado justo como lo queremos, olvidamos todo lo que sí hemos logrado, ignoramos esos pequeños avances que son justo los que nos sacan de donde estábamos y nos van acercando a donde queremos estar. Por eso, la meta es caminar, caminar cada día un chispi hacia eso que queremos, es también saber pausar y descansar para recargarnos y poder seguir, o cambiar la dirección. Dejemos de medirnos por lo que no vemos realizado todavía y empecemos a enfocarnos en lo que de verdad importa, el aquí y el ahora.

Amiga, hoy te hablo de lo que para mi es la diferencia entre nuestra intuición o higher self hablándonos, y nuestro ego.

SPOILER ALERT: Si no te gusta que te cuentes las pelis, mejor no escuches este episodio hasta tanto hayas visto Barbie. Si no te interesa verla o te da lo mismo que te cuentes, sigue escuchando. Te hablo de mi experiencia viendo la película y los por qué para que Barbie me represente.

Amiga, por eso de darle a la matraca con el poder que tienes de elegir SIEMPRE, te cuento lo bonito que se siente cuando eliges, en una situación de mierda, dejar de quejarte y RE-ENFOCAS tu energía en lo bueno o positivo que nos deja cada situación o evento, por más bobo que parezca. Y es que es en le día a día, que vamos creando los hábitos que construyen una vida feliz.

Por eso de machacar con que escuches tu cuerpo, hoy te hablo de cómo hacer yoga puede ayudarte en ese proceso.

Luego de releer un libro de la escrito Elísabet Benavent titulado "Un cuento perfecto", como pasa cuando se relee una historia, hay cosas que saltan a nuestra atención que antes no, o que sí pero ahora las vemos diferentes. Pues esta vez no fue la excepción. De ahí surge este episodio, de observarme a través de la protagonista de la historia cuando queriendo la perfección del una situación según la definición en su cabeza de perfecto, se estaba perdiendo de la perfección que hay no solo en la realidad, sino en el con quién la compartimos.

Como la vida nos presenta las mismas lecciones una y otra ves hasta que aprendamos a verla e interpretarla diferente, desde un espacio amoroso, pues me pasó que me puso la bendita lección otra vez para que esta vez aprendiera a decir que no, en vez de hacer algo que no quiero solo por complacer y bendito momento, que mucho observé esta vez. Pero por su puesto, que antes de verlo de una forma amorosa, me fui en eguito Mode encabroná hasta que ELEGÍ diferente.

Ay amiga, la verdad que esto de auto-observarse y sanar es la historia de nunca acabar. Como parte de las cosas que entendí en la conferencia al ver al David que no se llama David con su pareja fue lo que es el compromiso que uno hace para con uno mismo y estar en una relación, y vamos, desde ahí se me ha estado presentando también el tema de el amor como decisión. Aquí cuento un chispi de eso y hago referencia a la tercera temporada de la Serie Bridgerton: La reina Carlota. Espero que lo disfrutes, y ve la serie por favor.

Amiga, he llego de mi viaje y WOW. Que mucha información recibí, que feliz está mi alma de haberle escuchado haber volado allá. Hoy te comparto lo que para mi fue mi lección principal en este viaje: el pasado ya pasó, no está, no existe; por lo tanto yo no quiero seguir cargando con él. Y es que cuando reconocemos al otro como lo que es, nuestro salvador, ese que nos muestra las actitudes y actos de nosotros mismos de las que no nos sentimos orgullosos (sea de esta o de otros vida) y aprovechamos eso para, en vez de juzgar al otro (y por ende seguir juzgándonosla a nosotros mismos) para perdonar-nos es bien fácil poder soltar lo que pasó dejar de darle al otro el papel antagónico en nuestras vidas. Es ahí cuando entendemos que lo que pasó ya no es, y si es, es sólo porque YO MISMA sigo cargando con esa culpa y por eso juzgo al otro. Cuando yo ME perdono, y dejo de juzgarME, no cabe espacio para juzgar al otro y guardar rencores. Por eso, lo que pasó, pasó y ya no lo quiero. No, no estoy diciendo con esto que si alguien se fue de tu vida tu nunca debes volver a conectar con ese alguien. Por el contrario, si alguien se fue y del alguna manera vuelve a estar frente a ti, ese alguien y tú aún tiene una cuenta pendiente, algo mutuo que enseñarse, que proyectarse. Ahora bien, tú puedes elegir si tomas este momento como una bendición, sueltas el pasado y los juicios viejos sobre esa persona y haces TU TRABAJO de mirar adentro y perdonar-TE; o si por el contrario, sigues cargando con la cruz y juzgando-TE por lo que ya pasó. Yo he elegido ir soltando. Y digo "ir" porque sé que con ciertas situaciones se me hace aún complicadito, pero ahí voy... observando-me, perdonándo-me, amando-me sin importar lo que pasó porque ya no existe, todo en el HOY. Disfrutando de la bendición que me da la vida al poder observarme y sanar con y a través del otro. Hoy acepto que el otro NUNCA me hizo nada, TODO me lo hice yo. Yo hoy quiero vivir a plenitud lo que día a día me ofrece la vida, sin pensar en lo que ya NO EXISTE. Por eso el pasado SIN RENCOR, el futuro sin temor y el presente CON TOMO MI AMOR.

Amiga, hoy te hablo de la importancia de hacerte consciente INCLUSO de lo que comes y los efectos que tiene en ti no sólo físicos, sino a novel emocional. Te invito a que, como parte de crear esa consciencia, elijas a desintoxicarte de ciertos alimentos para que veas cómo te sientes cuando no los consumes y cuando los vuelves a consumir. A su vez, lleva una libretista donde anotes todo lo que observes en ese periodo. Oye, no lo hagas todo de cantazo si no te sientes preparada o a gusto, es SÚPER VÁLIDO ir poco a poco; tampoco te digo que lo hagas para que elimines por siempre y para siempre los alimentos que identifiques que no te hacen bien. El propósito de este ejercicio es simplemente que conozcas el efecto que tienen los alientos que consumen en ti y en cómo te sientes para que puedas elegir mejor cuándo consumirlos. Por ejemplo, si X alimento te hace sentir triste pero te gusta demasiado y no lo quieres eliminar de tu dieta, simplemente no lo consumas en días que sabes que de por sí no te sientes emocionalmente estable o bien, porque va a ser un catalizador de cómo te sientes.