Hoy, El Gato sobre la Escoba, nos recuerda uno de los casos policiales más extraños que se han registrado en el panorama español. Hablamos del Caso Vallecas, conocido por su adaptación al cine en el año 2017 bajo el titulo Verónica y dirigida por Paco Plaza.
Gatos, gatas de la noche, subíos a vuestras escobaS porque sobrevolamos el Madrid de los años 90, comenzamos el vuelo
Nos situamos a principios de los años 90. Estefanía Gutiérrez era una adolescente de 14 años, la tercera de seis hermanos.
Vivían en el madrileño barrio de Vallecas, en un bloque de pisos.
Como muchos jóvenes Estefanía y sus amigas se sintieron interesadas por el espiritismo.
A escondidas veían películas que sus padres les habían prohibido, la saga de Freddy Krueger, El Resplandor, Poltergeist, y la que era su preferida EL exorcista.
Un día decidieron ser ellas las protagonistas de las aventuras de terror que veían en la tele, y se hicieron una ouija casera.
Durante un recreo se escondieron en el cuarto de la caldera del colegio y comenzaron una sesión. El novio de una de las amigas de Estefanía había fallecido recientemente en un accidente de moto y querían comunicarse con él.
Las tres amigas se sentaron en el suelo. Abrieron el tablero de ouija y colocaron un vaso de cristal encima.
Estaban nerviosas, la idea de volver a comunicarse con su amigo, de comprobar que realmente existe algo más allá de la muerte. Tenían miedo, pero lo ocultaban tras risas y caladas robadas a un cigarro, esto les daba la sensación de ser mayores, de estar jugando sin más.
Pero la ouija, es un juego peligroso, un portal a una esfera que desconocemos, en la que los vivos penetran en el territorio de los muertos...
CONTIENE LA GRABACIÓN DE UNA PSICOFONÍA REALIZADA EN LA CASA POR UN EQUIPO DE PARAPSICÓLOGOS