Hoy, en este ‘sin parar’ que es la corrupción del PSOE, entra en escena un cuñado de Patxi López, que por lo visto actúo de ‘eslabón’ en las compras de mascarillas chungas a la trama de Koldo y secuaces, pero no es el tal Melchor Gil el objeto de nuestros desvelos.
La protagonista, la estrella, de nuestro sermón es Begoña Gómez, 49 años, bilbaína de nacimiemto, leonesa de adopción, madre de dos hijas y perejil de todas las salsas.
Con una vaga licenciatura en ‘marketing no oficial’, la señora Gómez fue fichada como directora del IE Africa Center, a los dos meses de que su marido, agarrado de la mano de proetarras y golpistas, se metiera en La Moncloa merced a una artera moción de censura contra Rajoy.
Y dos años después, quizá porque su cónyuge era presidente del Gobierno, la muy publica Universidad Complutense la colocó como directora de la Cátedra extraordinaria de Transformación Social Competitiva.