Cuando te sientes rodeado de presión y miedo, es fácil perder la perspectiva. Pero, ¿y si Dios ya proveyó la ayuda por la que has estado orando? Mantenlo en contexto: la batalla no es prueba de que estés perdiendo; es evidencia de que llevas algo por lo que vale la pena pelear.«Ustedes, queridos hijos, son de Dios y han vencido a esos falsos profetas, porque el que está en ustedes es más poderoso que el que está en el mundo». – 1 Juan 4:4 (NVI)

Referencias bíblicas:2 Reyes 6, versículos 8-17Romanos 8, versículo 181 Juan 4, versículo 4Génesis 37, versículos 16-18

¿Alguna vez sientes que tus oraciones no están siendo respondidas? El enemigo quiere hacerte creer que Dios no te está escuchando, pero la verdad es que Él te oye. Su presencia está contigo en las cumbres y en los valles, y está obrando momento a momento.

Referencias bíblicas:Salmo 120, versículos 1-71 Juan 5, versículos 14-15Juan 20, versículos 11-17

El pastor Steven nos da tres cosas para recordar cuando la vida se pone difícil. El enemigo quiere mantenernos dando vueltas en el desierto, pero Dios nos hará salir mientras aprendemos a repetir lo que nos lleva a la victoria.Si acabas de tomar una decisión por Cristo, responde AQUÍ: http://ele.vc/tIepfrReferencias bíblicas:Salmo 114, versículos 5-8Mateo 4, versículos 1-4, 11Hebreos 4, versículos 14-16Números 13, versículos 30-33Mateo 3, versículos 16-17

El enemigo ama atraparte en las mismas mentiras de siempre: «No es suficiente» y «no te aman». Pero la verdad de Dios rompe el ciclo. Cuando cambias lo que dices, cambias lo que ves, y su presencia abre un nuevo ciclo de paz y esperanza.

Referencias bíblicas:

Lamentaciones 3, versículos 17-24

1 Reyes 19, versículos 9-19

Apocalipsis 12, versículos 7-9, 11

«Dios, ¿puedes sacarme de esto?» Es una oración que todos hemos hecho. Pero, ¿y si la respuesta de Dios no es escapar, sino perseverar? ¿Y si su rescate llega un día a la vez? Este mensaje te ayudará a reconocer la provisión fiel de Dios en cada temporada y a aprender a confiar en su mano mientras te guía en medio de todo.

Referencias bíblicas:Lucas 11, versículos 1-4Éxodo 16, versículos 2-4Hechos 16, versículo 25

Cuando sientas que estás comenzando a hundirte en la tormenta, clama al nombre de Jesús. Él está cerca y no permitirá que te hundas. No entres en pánico ni te obsesiones con el problema, porque cuando te sincronizas con Jesús, las cosas pueden cambiar así de rápido.

Si acabas de tomar la decisión de seguir a Cristo, por favor responde AQUÍ: http://ele.vc/tIepfr

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Referencias Bíblicas:

Mateo 14, versículos 22-32

Isaías 55, versículos 6-11

A veces la batalla en tu mente es la prueba de que Dios está tratando de hacer algo grande en tu corazón. Lo que ves no es la imagen completa de lo que Dios tiene para ti. Cuando le entregas a Dios tus planes, le das espacio a Su propósito.

Referencias Bíblicas:

1 Crónicas 28, versículos 2-6, 19

Proverbios 19, versículo 21

1 Samuel 16, versículos 6-7

1 Samuel 17, versículo 47

Romanos 8, versículo 28

Llegar a tu límite no es una señal de debilidad; es una invitación a cambiar tu perspectiva. Cuando el enemigo trae la batalla a tu mente, recuerda que él solo ataca lo que tiene valor. Y la bondad de Dios es tu arma secreta para ganar la pelea.Si le has estado preguntando a Dios:¿Cuánto tiempo va a durar esto?¿Cuánto tiempo voy a estar enfermo?¿Cuánto tiempo voy a sufrir?¿Cuánto tiempo antes de que pueda soltar esto?¿Cuánto tiempo antes de encontrar a alguien?¿Cuánto tiempo hasta que esta lucha termine?¿Cuánto tiempo hasta que me sienta bien otra vez?Entonces, este mensaje es para ti.

Referencias Bíblicas:

Salmo 13:1-6

1 Samuel 17:34-35, 50

Efesios 6:12

1 Crónicas 28:11-12

No juzgues una parte de tu vida de manera aislada ni permitas que las expectativas no cumplidas definan tu futuro. Dios no ha terminado con tu historia, y no te trajo hasta aquí para que retrocedas ahora.

Scripture References:1 Corintios 13, versículos 8-112 Reyes 5, versículos 4-14Romanos 5, versículos 7-9

Vivimos en un mundo que valora más las cosas que los pensamientos, así que cuando Dios nos habla, no siempre lo valoramos como deberíamos. En este mensaje, aprende algunas de las formas en que Dios habla, cuándo pedirlo, y cómo reconocerlo cuando lo hace.
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Referencias Bíblicas:
Salmo 139, versículos 7-17
Jonás 1, versículos 1-6, 12-17
Jonás 2, versículo 1
Marcos 4, versículos 35-40