Quien tiene un amigo tiene un tesoro”, dice el refrán...
Cuántas veces nos ha ocurrido una cosa buenísima y hemos estado deseando contársela a esa persona especial que todos tenemos. Muchas, ¿verdad?
Porque... cuando tienes un problema ¿A quién acudes para desahogarte y saber su opinión? Pues a tu mejor amig@, seguro.
En este episodio te hablaré de la amistad y de su valor emocional.
Porque lo importante es tener a una o varias personas cercanas que te brinden su apoyo incondicional, que te hagan sentir plena y emocionalmente más estable.
Y es que contar con amistades verdaderas y sinceras tiene muchos beneficios:
Aumenta tu autoestima al sentirte querid@ por otra persona que no pertenece a tu familia.
Mejora tu bienestar cuando te sientes bien acompañad@.
Incrementa tu seguridad y confianza al sentirte respaldad@ en momentos difíciles.
Te hace sentir orgullo de pertenencia. Somos seres sociales y ello crea la necesidad de establecer relaciones e interactuar. Tener una verdadera amistad satisface esa necesidad y hace que te sientas “incluid@”.
Hay un enriquecimiento interpersonal al poder compartir experiencias y vivencias y aprender de ellas.
Disminuye tu estrés al poder compartir tus preocupaciones.
Cuando sientes el placer de realizar actividades con tu grupo de amigos, aumenta tu felicidad a través de la generación de endorfinas.
Abren tu mente a nuevas posibilidades sacándote de tu zona de confort.
Ayuda a recuperarte más rápido de una enfermedad. El apoyo social tiene efectos positivos en las dolencias y depresiones.
Uno es como es cuando está entre verdaderos amigos, por lo tanto, ayuda en la auto-aceptación...etc...