¿Qué esperas con la llegada de la Navidad? ¿El reencuentro con familiares, las fiestas con amigos, la deliciosa comida o los emocionantes regalos? Para un niño, la mayor alegría puede ser recibir un juguete, pero también es importante lucir ropa nueva como la de sus amiguitos. Sin embargo, no todos los niños tienen esa oportunidad.
Hoy, nuestra invitada Wendy nos compartirá su experiencia sobre el estreno que tanto anhelaba en su infancia. Creciendo con su madre y hermanos en medio de carencias, Wendy recuerda cómo, a pesar de las dificultades, siempre había una alegría navideña, gracias a los “ángeles” que Dios ponía en sus vidas.
Wendy relata una Navidad en la que, al ver a los demás niños con ropa nueva, sintió una profunda tristeza. Su madre, enfrentando la decisión entre comida o ropa, recibió ayuda de una vecina que la animó a comprarle un vestido, aunque no era de su talla. Para Wendy, lo importante era poder estrenar algo y seguir la tradición.