Desde pequeño, has comulgado, habitualmente, el cuerpo de Cristo. ¿No has pensado que, quizás, ha llegado la hora de que sea el Señor resucitado quien te comulgue a ti? Deja que te lo explique: Cuando, junto al pozo, Jesús encontró a la mujer samaritana, le dijo: Dame de beber (Jn 4, 7). Hoy, domingo de resurrección, el mismo Jesús, ya glorioso, les pide a sus […]