En este capítulo seguimos explorando el Evangelio según Marcos, capítulo 15 y 16, donde se relata la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Vemos cómo Pilato, pese a saber que Jesús era inocente, cede ante la presión popular, entregándolo a la crucifixión. Presenciamos el cumplimiento de antiguas profecías, la oscuridad que cubre la tierra en el momento de su muerte, y el rasgado del velo del templo, simbolizando el acceso directo a Dios. Finalmente, las mujeres que fueron testigos de su muerte y sepultura son también las primeras en recibir el anuncio de su resurrección, marcando el triunfo de la vida sobre la muerte y la fidelidad de Dios a su promesa de salvación.