Me he sentido limitado en situaciones de expectación social a lo largo de mi vida. He llegado a creer que soltar el control de mis expectativas es un hecho antinatural en mí. La realidad es que esa idealización de cómo debería ser para que me valoren, solo esta en mi mente, no es real. La improvisación y la entrega han de ser mi medio, debo aprender a moverme con gracia desde esa perspectiva.