El nuevo álbum de Jose Domingo es una fuente de esquirlas incandescentes de
pop rock gozoso, mediterráneo y psicodélico que llega para incrustarse en tu
subconsciente como una daga de jade. Suena a todas las cosas que nos impulsan a
subir el volumen o apretar el acelerador al llegar a una pequeña cima para
sentir ese cosquilleo en el estómago. Una pirueta sónica que ha de recordarnos,
por ejemplo, a The Doors sonando a todo volumen mientras giramos
apresuradamente hacia Lookout Mountain desde Laurel Canyon Avenue sin tiempo a
preguntarnos qué ha pasado o dónde estamos. O quizás un fogonazo
eléctrico al final de la tarde bajo un cielo naranja nuclear muy Sisa y muy
Riba en Santa Eugenia, en Mallorca. Huele a tierra mojada después de la
tormenta.
Jose Domingo ha cruzado una línea sensacional en su viaje a través de la
galaxia; se halla en ese preciso instante de su trayectoria profesional en el
que nos invita a adivinar sus amplias influencias mientras nos seduce con su
propia firma instalada en cada acorde, inversión, pista y eco de lo que será,
sin duda, uno de los álbumes nacionales esenciales de 2022. El nuevo álbum de Jose Domingo es una fuente de esquirlas incandescentes de
pop rock gozoso, mediterráneo y psicodélico que llega para incrustarse en tu
subconsciente como una daga de jade. Suena a todas las cosas que nos impulsan a
subir el volumen o apretar el acelerador al llegar a una pequeña cima para
sentir ese cosquilleo en el estómago. Una pirueta sónica que ha de recordarnos,
por ejemplo, a The Doors sonando a todo volumen mientras giramos
apresuradamente hacia Lookout Mountain desde Laurel Canyon Avenue sin tiempo a
preguntarnos qué ha pasado o dónde estamos. O quizás un fogonazo
eléctrico al final de la tarde bajo un cielo naranja nuclear muy Sisa y muy
Riba en Santa Eugenia, en Mallorca. Huele a tierra mojada después de la
tormenta.
Jose Domingo ha cruzado una línea sensacional en su viaje a través de la
galaxia; se halla en ese preciso instante de su trayectoria profesional en el
que nos invita a adivinar sus amplias influencias mientras nos seduce con su
propia firma instalada en cada acorde, inversión, pista y eco de lo que será,
sin duda, uno de los álbumes nacionales esenciales de 2022.