No significa que por el hecho de ser cristianos nos hacemos uno con Cristo, Mateos 15:8-10 “Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran, Enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres”.para ello debemos tener un mismo corazón con Él.

       No hay nada que sea imposible para Dios, y su propósito siempre ha sido bendecirnos en todo conforme a su agradable y perfecta voluntad, 2 Timoteo 3: 1-5;14-17 “también debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita”.

     la biblia que nos muestra la tremenda responsabilidad que adquirimos los padres delante del juez justo nuestro Dios es la de cumplir nuestro roll primero que, en nuestro trabajo, primero que en ti ministerio es en la familia específicamente en cuanto a la gianza y corrección de nuestros hijos; Prov. 22:6, Mateo 19:14” Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él. Pero Jesús dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos”.

     Cuando venimos a los pies de Jesús, se establecen a través de la gracia de Dios dos cosas en nuestro ser: NUESTRA IDENTIDAD Y NUESTRO DESTINO,Romanos 12:2 “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta”.

      Después de su resurrección, Jesús comisionó a sus discípulos para anunciar el evangelio del Reino de Dios: “Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado. Y yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”,Mateo 28:18-20.   [email protected]

        En este mundo todo se rige por la voluntad de Dios nada ocurre por casualidad, por tal motivo no debes permitir por ninguna circunstancia que los fracasos y las situaciones sombrías que tiene poca luz (en ausencia de la sabiduría de Dios), nos conduzcan a una vida llena de melancolía y pesimismo, Proverbios 21:30-31 “No hay sabiduría, ni inteligencia, Ni consejo, contra Jehová”. El caballo se alista para el día de la batalla; Mas Jehová es el que da la victoria.

      Nosotros no somos los perdedores somos los victoriosos de la guerra espiritual, porque Jesús pelea por nosotros, no somos los que vamos a ser derrotados somos los más que vencedores, 1 Tesalonicenses 5:3 "Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda como ladrón”.

     El desconocimiento de las operaciones del mundo de las tinieblas, nos hace blanco fácil de sus ataques, de ahí que vemos muchos cristianos con la falsa creencia de que por el hecho de  ser cristianos, estamos exentos de los ataque de las fuerzas de las tinieblas,2 Corintios 2:11 “para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones”;, pues la palabra dice, Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar.

El apóstol pablo deja bien en claro haciendo énfasis a través de la palabra de Dios en dos aspectos fundamentales:

        *En primer lugar*, en la certidumbre de la venida del Señor 1 Tesalonicenses 4: 13-14; 16-18. “Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras”.  En *segundo lugar*,la incertidumbre del día de su venida 1 tesalonicenses 5:1-6. “que el día del Señor vendrá, así como ladrón en la noche”.

Malaquías4:5-6 “He aquí, yo os envío a Elías el Profeta antes que venga el día de Jehová, grande y terrible.  Él hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición”.

          Las consecuencias de desconocer la Palabra de Dios son graves y nos llevan a tomar rumbos equivocados poniendo en peligro nuestra eternidad. La Palabra de Dios dice en Oseas 4:6: “Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos”.