Para el creyente, que el canon cerrado sea la revelación autoritaria completa es importante ya que, la Sagrada Escritura contiene todas las cosas necesarias para la salvación: así pues, todo lo que no se lea en ella, ni se pueda probar por medio de ella, no se exige a nadie que lo crea como un escrito de la fe, ni se considera un requisito o algo necesario para la Salvación. Es decir, puede el creyente confiar en que lee, estudia y vive en las palabras y mandatos inspirados por Dios por medio de cada uno de los libros del canon, y que este está completo, que no cambiará, y que es la Palabra autoritaria de Dios.