En este episodio hablamos Ciro, alias el Mulo. Después de soñar que su hija se mea fuera del tiesto, Astiages, el abuelo de Ciro, empieza a pensar que su nieto quizá le quite el trono. El problema es que, gusten o no a quien los tenga, los presagios oníricos tienden a cumplirse, y Ciro acaba por amargarle la vejez a su pobre abuelo.
Además, y como no podía ser de otra manera, los pueblos sobre los que gobernará Ciro como rey de los persas son al menos tan trambólikos como sus reyes. Heródoto no puede dejar pasar la ocasión para contárnoslo... y nosotros tampoco.