Isabel de Farnesio mandó construir un palacio rosa cuando su hijastro la echó de la corte. Nicolae y Elena Ceaușescu tenían unos delirios de grandeza más grandes que el Palacio del Pueblo de Bucarest. La utopía urbana de Le Corbusier pudo materializarse, después de toda una vida, con el diseño de la ciudad de Chandigarh. Mientras, su amiga Minnette de Silva, la primera mujer en licenciarse en arquitectura en Sri Lanka, le enviaba postales de Vishnu para felicitarle la Navidad.