A mediados de julio, el gobierno lanzó la Estrategia Interinstitucional de Revinculación Educativa para reincorporar a estudiantes que habían abandonado la educación.
El operativo, coordinado por ANEP, MIDES, MEC, INAU y BPS, entre otros actores públicos y sociales, detectó 5.382 menores en edad de educación obligatoria que no asistían a clases.
En conferencia de prensa, el presidente de la ANEP, Pablo Caggiani, y el ministro de Desarrollo Social, Gonzalo Civila, informaron que, de los 5.382 niñas, niños y adolescentes detectados como desvinculados del sistema educativo, 2.246 retomaron sus estudios en las primeras tres semanas de julio de este año.
Las autoridades explicaron que la estrategia incluyó visitas domiciliarias y contacto directo con las familias, lo que permitió entender las causas del abandono, y, en ese sentido, detalló que no hay un único motivo.
“Había necesidad de que hubiera otro yendo a buscar, conversando. Tenemos un conjunto de gurises que aún así no retornan. Ahí las situaciones son realmente múltiples y todas muy embromadas para la vida de los gurises, desde no poder dejar la changa porque hay que pagar la olla en casa, hasta situaciones de salud o de muerte del familiar que cuidaba. Es decir, nos está dando información de qué cosas tenemos que mover desde el Estado para garantizar el derecho a la educación y vincularlos a instituciones”.
El Estado continuará el seguimiento y, mientras tanto, quienes no estén inscritos dejarán de percibir asignaciones familiares.
Además, señaló que los adolescentes de 15 a 17 años fueron los que presentaron más dificultades para la revinculación, y agregó: “Ahí hay que poner la lupa, ver qué nos está pasando, y qué les está pasando a los gurises que no logramos que estén en un centro educativo”.