Práctica de mindfulness sobre los fundamentos, actitudes básicas, compromiso, autodisciplina e intenciones o motivaciones. Meditar no es solo observar el flujo de la respiración, por ejemplo, conlleva sentarte contigo en tu intimidad con bondad y estando atent@s para integrar o encarnar cada vez que vayas a practicar mindfulness: la confianza, la paciencia, la aceptación, el dejar ir, no juzgar, no esforzarte y la mente de principiante para desarrollar y elevar tu consciencia. Todo ello hará que de formal natural se transforme tu mente y se abra tu corazón, para llegues a ser, el Ser que realmente eres, y no el que crees que eres.