Date permiso de parar cuando sea necesario. De aprender de todo tu camino.

El amor no niega lo que le duele, lo atiende, lo escucha, lo sana.

El miedo lo niega, lo esconde y lo hace más grande.

Estar unido a alguien es distinto a estar "pegado".

Salir del parloteo mental es esencial para volver al equilibrio.

Sintoniza con tu Corazón.

Poner límites, decir ya no, poner distancia, también es amar.

Si te sientes culpable aún de cosas del pasado; si hay algo que te apena o te sigue inquietando, atrévete a ver eso desde tu crazón para sanarlo y volver a ser libre.

Cada segundo de tu vida, es una oportunidad para volver a empezar, desde una nueva perspectiva.

Soltar el pasado y aceptar lo nuevo, es empezar a decir No con claridad a lo que no necesitas seguir cargando.

Relaciones, trabajos, proyectos que te hunden y te esclavizan, es preciso que terminen.

Eso es Sagrado. El final que te lleva a tu horizonte nuevo y a vivir en libertad y plenitud.

Tu cerebro pensando solo, no te procurará ni tranquilidad, ni confianza.

Necesitas a tu Corazón también para hacerte ver todo desde una perspectiva más sabia.