Como apátridas que vuelven a la casilla de salida.
Como olas que rompen el hueso parietal.
Como hombres valientes que lloran a escondidas
Como todas las mentiras que resultaron ser verdad.
Como bellas palabras enredadas en tu melena.
Como noches sumergidas en fluido seminal.
Como luz de gas que ilumina tu presencia
Como trenes que se pierden en la noche de cristal.
Como voz de alarma en tiempos de paz.
Como melodía zíngara cortada con metal.
Como efluvios breves que escapan del Siam
Como aviones en llamas que se estrellan en el mar.
Narcisos frente al espejo.
Nobel a la vanidad
Lejos, por los senderos
Que llevan a la eternidad.