cazar los fantasmas de los porqués
dejar de sentir tierra bajo los pies.
Ser constante reloj de arena
Ser la brújula del perdido
al encontrar oro en el error de buscarse tan constante para derretir los soles
y esculpir estrellas o desgarrar el cielo
después cantar la victoria y aprender de la derrota
constante como la oscuridad;
que no deja que se caiga el tiempo
ningún segundo queda vacío
pero es imposible impedir que se queden en nada
de un preciso silencio en el que el mundo
se detiene entre dos bocas.
Al extender el tiempo y darle nombre
guardardo para poder soportarme.
Entonces mejor ser el silencio
y después ser el villano que acaricia un gato,
o eclipsar todas las luces del cielo a una mano sin acumular la rabia que deja el sabor podrido del mundo
izar las banderas de los gritos
colapse los agujeros negros en el corazón
sístole de otro cuerpo que borra la mancha del el alma
con la eternidad entre moronas de recuerdos
y nadar con las sirenas que viven en tus ojos
sin ahogarme en las lágrimas.
quedarme a vivir en medio de un suspiro
dejar que me respires hasta quedarme sin aire
y ver a dónde ven tus ojos
hacerme nido en tu hombro
ser el filo y no la espada
ser los segundos y no el reloj
ser el más tarde y no tal vez
Ser nosotros constantemente
al pescar el tiempo de tu boca
puedo tatuar silencios en tus lunares
Rompen las olas en mi cuerpo
al andar los días sin tu mano
el suave remedio a mi soledad calcinada por el recuerdo de bailar hasta deshacerme los pies.
y grabar en algún hueco del cerebro
el mapa de tu anatomía entre mis dedos
cada centímetro de tus playas morenas
dónde ya no importa ganarse el cielo
para amar tan rápido con la duración de un orgasmo
o al amar lento hasta mentirle al tiempo
en el abismo que guardan tus pupilas .